

En mitad de la carretera Alí se paró a comprar a unos niños una especie de palitos que ellos utilizaban como cepillo de dientes, se los repartieron entre el soldado y él, nos ofrecieron pero no quisimos, sólo Jaime aceptó que como siempre se apuntaba a todo, Elena su mujer que era un poco mas desconfiada y precavida Ie cortó al palito la empezadura con una navaja. No dejabamos de movernos, ibamos superapretados, Ali se percató de todo, frenó en seco y nos pasó a Carmen y a mí para adelante y el soldado para atras, de esta manera íbamos tres y tres. En la parada siguiente cuando el guía detuvo la caravana para hacer " sura" , se l0 empaquetamos a Kamal que tambien protestó. De camino paramos en algunos pueblos, al atardecer llegamos a Aden ... aquello ya era una ciudad, con edificios altos, anchas avenidas, trafico, muchas tiendas, l0 mas parecido a la civilización, parecia que habíamos salido del Yemen de repente. A mi no me gustaba nada la pinta. Nos instalamos en un hotel superantiguo pero precioso con los techos muy altos, las habitaciones inmensas, las camas enormes, una galeria que cruzandola se pasaba al baño, todo dentro de la habitación y los muebles parecían tener setecientos años 0 por l0 menos me imaginaba a mi tatarabuela mirandose en aquel espejo que se balanceaba mientras se retocaba, con los pies puestos en aquel cajón; la decoracion era toda rosada, las paredes, las colchas ... era muy original. Y como podía faltar el ascensor con ascensorista incluído que plegaba y delpegaba la puerta para cedernos el paso y subir mirando las escaleras. La cena estuvo bastante aceptable pero creo que eramos los (únicos clientes del hotel al menos yo no vi a nadie mas. Después de cenar Mohamed me esperaba en el Hall, también estaba Alí que esperaba a Carmen para salir pero no se atrevía a decirle nada, ella salió del comedor y se dirigió al ascensor diciendo hasta mañana, estaba agotada, entonces Mohamed me dijo: -¿ Que es que Carmen no viene? Yo Ie pregunté: -¿Con quien? -Con Alí, el se ha preparado para salir con ella. Y yo Ie dije: -Pero .... ¿se lo ha propuesto? No. -Entonces ¿como espera que ella venga sin decirle nada? -Díselo tu, el no se atreve. . Asi que cogí el ascensor antiguo en compañía del ascensorista, subí al segundo piso y hablé con ella, me dijo que si el se l0 pedía bajaría sino no. Cuando salí de la habitación el ascensorista me esperaba con la puerta abierta y sonriendo como si controlara todo el cotarro que estabamos montando. Cuando llegué abajo con la respuesta Alí quedó decepcionado y pasó de todo, entonces me dije: voy a pasar de celestineos y divertirme asi que me fuí con Mohamed, subimos en el toyota y dimos un paseo por la ciudad que aparentemente no tenía mucho ambiente a las diez de la noche; me propuso ir a la discoteca y acepté. La ciudad de noche era bien fea, oscura apenas se veía gente por las calles; llegamos a una discoteca muy iluminada donde había un monton de coches aparcados y algunas mujeres vestidas de negro, Mohamed se bajó del coche un momento y me dijo que esperara, cuando volvió me comentó que era solo para mujeres no podíamos entrar, al menos juntos. Decidimos ir a otra que estaba un poco mas alIá, tenía un muro rodeandola y un vigilante sentado en una silla con un talonario en la mano parecía de mucho postin, este nos comentó que era discoteca con cena incluíida y costaba cinco mil reales poar cabeza nos pareció excesivo, ademas ya habíamos cenado, asi que nos fuimos para el hotel ya que no había nada en toda la ciudad. Antes de llegar nos tropezamos con un atasco causado par el anuncio de una boda una serie de coches se perseguían unos a otros pitando por toda la ciudad, en uno de ellos iba el novio que se casaba al dia siguiente. Hubo un momento de choque y la caravana se detuvo, entonces los conductores salieron de sus coches todos con un arma en dirección al atasco.
